Un estudio reciente en el que participó el Profesor Jonathan Martínez, publicado en la revista Pharmaceuticals (https://doi.org/10.3390/ph18081128) mostró que el aceite esencial de Origanum vulgare L. (orégano) mejora la señalización de insulina y la captación de glucosa en células adiposas humanas tratadas con ácido palmítico, una grasa saturada vinculada a la obesidad.
El aceite, rico en compuestos fenólicos y con alta capacidad antioxidante, no resultó tóxico y logró revertir parte del daño celular inducido por este lípido. Estos resultados sugieren su potencial como agente complementario para tratar la resistencia a la insulina y trastornos metabólicos relacionados.